El Team Mind Mapper de inventio•lab es una herramienta metodológica que le permite a equipos y organizaciones explorar, conocer y ver las percepciones de grupos de personas que necesitan compartir mapas de navegación para la acción coordinada en política o la comunicación estratégica.
En el lab quisimos usar el Team Mind Mapper con el fin de explorar los temas percibidos como más importantes en la actual contienda electoral a la presidencia de la República en Colombia según las opiniones de un grupo de jóvenes.
Realizamos el ejercicio en noviembre de 2009 y posteriormente lo repetimos en abril del 2010. El cambio en las percepciones nos permite lanzar algunas hipótesis, que si bien no son susceptibles de generalizaciones, ofrecen unas sugerentes conclusiones sobre los efectos del proceso electoral en las opiniones y percepciones de los ciudadanos.
La gráfica del Team Mind Mapper muestra las mentes de un grupo de jóvenes profesionales bogotanos y sus creencias sobre los temas que en su opinión definirían las elecciones del 2010. En la gráfica izquierda vemos representadas las opiniones y creencias del grupo en noviembre de 2009 y a la derecha sus creencias cinco meses después. (ver imagen completa aquí)
X = Dificultar percibida del problema a resolverY = Gravedad percibida del problema a resolverColor = Gravedad percibida del problemaTamaño = Relevancia/Importancia del problema/tema para decisión de voto
Aunque la gráfica ofrece enormes posibilidades de análisis, nos concentraremos en tres conclusiones que saltan a la vista:
1. Menos temas y más acuerdos: El grupo reconoció un número menor de temas como relevantes para la contienda electoral. En la exploración en noviembre de 2009 los jóvenes identificaban temas puntuales y coyunturales como relevantes para la decisión de voto (i.e; TLC, reelección, falsos positivos), mientras que en abril del 2010 los agruparon con mayor consistencia y bajo sombrillas mas amplias (i.e; empleo, seguridad, narcotráfico).
El efecto de la información generada desde las campañas explica en buena medida que los jóvenes hayan sido capaces de identificar un conjunto más concreto de problemas como relevantes a la campaña electoral.
2. Las campañas agravan los problemas. Mientras que en noviembre había cierta dispersión en cuanto a la relevancia, gravedad y dificultad de los temas (ver gráfica izq), en abril, después de dos meses intensos de información de campañas, los mismos jóvenes perciben los problemas relevantes como más graves y más difíciles de solucionar.
Los candidatos ofrecen al electorado soluciones a problemas que consideran más graves e importantes. Adicionalmente, deben competir con otros candidatos por definir sus problemas como los relevantes. Esto resulta en una probable tendencia a presentar los problemas como graves y urgentes en los mensajes que envían al electorado. Se podría decir que al competir con otros candidatos por definir cuéles son los problemas graves y cuáles no lo son, los candidatos llevan a los ciudadanos a percibirlos como más graves y más difíciles de solucionar.
3. ¿Una agenda verde? Si se comparan las respuestas del grupo en noviembre con las percepciones reveladas en abril, es posible ver un cambio en el lenguaje que resulta interesante, por decir lo menos.
Mientras que en noviembre los temas más relevantes (tamaño) resultaban ser “lucha guerrillera” y “seguridad democrática”, en abril los jóvenes eligen denominarla simplemente “seguridad”. Lo que en noviembre varios habían elegido llamar “Venezuela”, parece convertirse en “Relaciones Internacionales”. Asímismo “educación”, que había sido un tema marginal y de poca gravedad, de repente se convierte en parte del racimo de los problemas graves, importantes y difíciles.
Aunque el grupo explorado no es, de ninguna manera, representativo de la sociedad colombiana, el experimento ofrece unas conclusiones sugerentes e invita a lanzar hipótesis sobre el efecto de las elecciones en las opiniones de los colombianos en la actual contienda electoral.
El ejercicio revela también uno de los usos que el Team Mind Mapper ofrece a la comunidad de inventio•lab para la investigación y comprensión del mundo de la política y la comunicación estratégica.
inventio•lab investiga y comunica
Juan Fernando Giraldo
viernes, 30 de abril de 2010
lunes, 26 de abril de 2010
Campañas presidenciales 2010: buenas, bonitas y baratas.
Esta contienda electoral es y será una de las más significativas que el país ha tenido y tendrá en muchos años. Se terminan ocho años de gobierno de uno de los líderes colombianos con más favorabilidad y popularidad. Con su adiós el próximo 7 de agosto, los males que acechan a Colombia aún no habrán desvanecido; pero con seguridad entrega un país completamente distinto al que recibió aquél 7 de agosto de 2002.
A tan poco tiempo de definir quién se trastea a la Casa de Nariño, hay en Colombia un diverso menú de opciones. Ante unas elecciones de tanta trascendencia, las campañas de los hoy seis candidatos trabajan arduamente por convencer, enamorar, y jalonear a nuevos y viejos votantes que se preparan para las urnas el 30 de mayo. Como los candidatos, las maneras de hacer campaña son diversas y coloridas.
Con tanta variedad, se puede resaltar que hay campañas buenas (unas más que otras), bonitas, y baratas. El electorado decidirá cuál le convence más.
Buena la campaña de Germán Vargas Lleras. Se ha caracterizado por tener tajante claridad tanto en sus propuestas políticas como en sus posiciones. Desde que comenzó su campaña, el lenguaje y narrativas de su publicidad y su discurso han sido coherentes, demostrando continuidad lógica y seriedad. Como ha promovido en varias ocasiones el mismo candidato, vale la pena entrar a su galardonada página www.vargaslleras.com para conocer y entender la naturaleza de sus propuestas. No todos estarán de acuerdo con lo que propone ni para todos es él su candidato, o Cambio Radical es su partido de agrado; pero incoherencia, falta de claridad y mediocridad no son adjetivos atribuibles a su campaña. La narrativa Vargas Lleras ha sido consecuente. A pesar de no estar punteando en las encuestas, el candidato continúa demostrado la misma seguridad y coherencia en sus discursos, entrevistas y debates. Tiene propuestas claras en veintiún frentes que van desde la seguridad y la salud hasta la modernización del Estado y la comunidad afrocolombiana. Pareciera ser el único con una propuesta programática tan completa y preparada.
Bonita la campaña del Partido Verde. Ha logrado un entusiasmo similar al de campañas como las de Galán y Obama con una narrativa optimista de transformación que ha inspirado a miles de ciudadanos. Ha sacudido los ataques de sus contrincantes con palabras sabias y prudentes. Respetuosamente ha rechazado ofertas grandes de dinero, y aún así, ha sido invadida de jóvenes, viejos y nuevos votantes, artistas, académicos, y analistas que creen en una nueva forma de hacer política. Mockus ha escalado rápidamente en las encuestas, alcanzando por pocos puntos y en poco tiempo a Juan Manuel Santos. Ha atrapado la atención de medios internacionales como el Wall Street Journal y Bloomberg. Su página de Facebook registra más de 400,000 fans, ubicándolo en la lista de los más famosos políticos de esta red social, compartiendo el escenario con Barack Obama y Nelson Mandela. ‘La ola verde’ ha encendido un motor poderosísimo de inspiración en miles de colombianos que han desplegado su apoyo con creatividad y entusiasmo como pocas veces lo suelen hacer.
Barata la campaña de Juan Manuel Santos. Sus capacidades, hoja de vida y trayectoria le han otorgado inmenso reconocimiento como estratega y dirigente hábil y capaz. Sin embargo, la narrativa adoptada por su campaña está llena de encuadramientos ‘baratos’ y declaraciones inoportunas que subestiman tan amplia y respetada trayectoria. El 13 de abril, fue publicado un video en la página del canal venezolano Telesur relatando el fenómeno de Antanas Mockus. Siete días después, la campaña de Santos compartió el video con sus fans Facebook bajo el titular de: ‘Presidente Chavez, por medio de SU canal TELESUR, estimula el voto por Mockus. Eso que les dice?!?! MUCHO CUIDADO!’. Aunque el video no estimula el voto por Mockus, la campaña de Santos encuadra el video con un lazo (inexistente) entre el dirigente venezolano y el candidato presidencial colombiano. Esta campaña también ha contado con el vocero más importante del país a pesar de clarísimas restricciones legales que lo impiden de opinar públicamente sobre los candidatos: Álvaro Uribe ha hecho declaraciones que subestiman y minan habilidades de Mockus que años atrás él mismo había celebrado y condecorado. Por consiguiente, ha subestimado y minado la capacidad del mismo Santos para hablarle a su electorado sobre su plan programático. Lo barato puede salir caro.
A diferencia de cuando uno va de compras y busca algo ‘bueno, bonito y barato’ que pocas veces suelen ofrecerle, la contienda electoral en Colombia parece ofrecer campañas buenas, bonitas y baratas. El 30 de mayo veremos cuál logra convencer al elector colombiano.
Laura Adiwasito Senior
Comunidad inventio•lab
investiga y comunica
lunes, 12 de abril de 2010
Porqué Juan Manuel Santos puede ganar las elecciones (y tal vez lo haga)
El problema con las olas (y con los tsunamis) es que su desvanecimiento es tan súbito como su surgimiento. En una entrada anterior de nuestro blog explicamos cómo una victoria de Antamas Mockus el 30 de mayo de 2010 era posible. En esta ocasión ofrecemos tres razones para explicar porqué Juan Manuel Santos podría ganarle al candidato del Partido Verde.
La explicación se encuentra en la emoción, el contenido y el poder político y mediático.
Porque la emoción es efímera y pasajera; siempre.
La emoción explica en buena medida el rápido crecimiento del apoyo al Partido Verde en las redes sociales y las encuestas de opinión. Esta emoción en contextos electorales tiene dos rasgos que pueden resultar riesgosos para el Partido Verde. Es frágil y es superficial.
Los ciudadanos podemos cambiar de opinión rápidamente cuando un candidato apela a nuestras emociones, sobre todo si logra sintonizarse con las del electorado. Sin embargo, los cálculos que se desprenden de la emoción pueden romperse fácilmente. Un argumento, un evento o una mala salida en medios pueden romper el encanto.
Por si fuera poco, la emoción es superficial. La decisión de votar por el Partido Verde no está amarrada a contenidos profundos en la mente del ciudadano de a pie. Las expresiones de apoyo se manifiestan en deseos abstractos que no se traducen en expresiones puntuales de posiciones políticas o programáticas (1).
Justificar la decisión de votar por Antanas es sencilla cuando se está frente a una marea de personas que están igual de emocionadas a mí. No resulta tan fácil cuando el interlocutor está exigiendo razones concretas.
Así, la emoción es un instrumento muy útil para cautivar electores, pero el resultado es frágil y superficial. Seis semanas es tiempo suficiente para demolerla como estrategia (o fenómeno) de movilización.
Porque el contenido SI importa
No cabe duda que el equipo del Partido Verde ha hecho un trabajo serio y juicioso de organización de sus propuestas. Estas, sin embargo están fragmentadas y aún no se han convertido en contenido útil para las conversaciones de los electores.
Acusar al cuarteto de Lucho Garzón, Enrique Peñalosa, Sergio Fajardo y Antanas Mockus de no tener propuestas claras o un plan de gobierno resulta contra intuitivo. El reto de este partido ofrecer un cuerpo coherente de las propuestas en las que están pensando y deben empezar a publicarlas, por todos los medios, de la manera más sencilla y explícita.
El equipo de Antanas debe entender que la pedagogía es una forma, de un menú de cientos de opciones, de persuadir legítima y democráticamente a los ciudadanos. Deben ofrecer contenidos simplificados, sencillos y concretos que indiquen qué piensan hacer una vez lleguen al poder.
El contenido fragmentado y poco claro contrasta con la oferta centralizada y simplificada que ha puesto en marcha la campaña de Juan Manuel Santos y que podría resultar en la primera de varias estocadas que puede asestarle la campaña de la U al Partido Verde.
Porque tener al gobierno y a los medios del lado de uno ayuda
El otro factor que podría explicar un decrecimiento paulatino de la campaña de Antanas frente a la de Santos es la estrecha relación del segundo con el gobierno de Álvaro Uribe y los medios de comunicación. No es mucho lo que puede hacer el Partido Verde al respecto. La cercanía al gobierno actual y a los medios de comunicación le permite a la campaña de Santos llegar con altos volúmenes de información a más ciudadanos por más canales.
Los medios tradicionales de comunicación podrán hacer esfuerzos serios por garantizar el balance y la imparcialidad en el trato a los candidatos, pero se va haciendo claro que los medios tradicionales, en especial los que algunos han denominado oficialistas, no están muy ávidos a usar su tinta verde más de la cuenta. El valor de los nuevos medios en las estrategias políticas es innegable y esta campaña ha ofrecido testimonio de ello. Sin embargo, aún no son suficientes para competir con los medios tradicionales en la producción de volúmenes de información que le permitan a la campaña del Partido Verde a llegar de manera insistente a la mayoría de los ciudadanos para ganar una contienda a la presidencia de la República.
Su cercanía a los medios tradicionales y al gobierno de turno le ofrecen a Juan Manuel Santos una oportunidad única de inundar a los ciudadanos con información.
La fragilidad y la superficialidad de la emoción, el contenido fragmentado y poco claro del discurso y la fuerza del poder político y mediático de su contrincante son los retos a los que se enfrenta el Partido Verde y que explicarían una eventual victoria del partido de la U. Como están dispuestos hoy (12 de abril) las fuerzas políticas, este parece ser el escenario más probable.
Las fortalezas de Santos hoy se construyen sobre las debilidades de los verdes. Los verdes tienen la iniciativa y los naranja están haciendo la tarea para sacar toda la artillería en la segunda vuelta. Muchas cosas podrán cambiar en las siguientes semanas.
inventio•lab investiga y comunica
Juan Fernando Giraldo
(1) Entiendo que el primer círculo de influencia de la campaña (jóvenes, centros urbanos, estratos 3+) sienta que las propuestas son obvias. Eso no se traduce automáticamente en contenido útil y apropiable para el ciudadano. Hay que generarlo, simplificarlo y publicarlo hasta la saciedad.
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Mutz Diana et al (eds) (1996). Political Persuasion and Attitude Change. The University of Michigan Press Neuman, Russell y Marcus, George et all (eds) (2007) The Affect Effect. University of Chicago Press Price, Vincent (2005). Opinión Pública: Esfera pública y comunicación. Editorial Paidós, Barcelona. Price, Vincent (2001) Motivations, Goals, Information Search, and Memory about Political Candidates. Political Psychology, Vol. 22, No. 4. pp. 665-692 Universidad Externado de Colombia (2009). Centro de Investigación en Comunicación Política. Facultad de Comunicación Social. Comunicación Política Colombia 2008, Bogotá, febrero 25 de 2009. http://www.fortalecimientodemocratico.org/recursos/publicaciones Zaller, John (2006). The Nature and Origins of Mass Opinion. Cambridge University Press.sábado, 10 de abril de 2010
Apartes del Artículo “Elecciones en la Red” (R. Credencial)
Era de esperarse que Internet y las redes sociales jugaran un papel novedoso en las campañas presidenciales del 2010 en Colombia. Lo que tal vez nadie se esperaba era que Antanas Mockus, al frente de un partido hasta hace unos meses desconocido, fuera el llamado a dominar este escenario de deliberación pública y mucho menos que lograra cambiar el mapa político del país usando como punta de lanza Facebook y Twitter.
A propósito, la Revista Credencial publica el artículo, “Elecciones en la Red” (ver artículo completo).
Compartimos en este espacio un fragmento de la publicación.
Los candidatos a la Presidencia sí que conocen el poder de Internet. Por eso no han reparado gastos en aplicar lo último de la tecnología en las páginas de sus campañas.
(…)
Juan Fernando Giraldo, politólogo especializado en opinión pública y mercadeo político, dice: "En la comunicación viral se va más allá de la página de Internet. Eso significa que quienes apoyan a un líder se apropian de un mensaje y lo reproducen en sus redes sociales. La idea es generar repetición y volumen de información, dos rasgos cruciales para la política". Así sucedió aquí, en Colombia. Días antes de la consulta del Partido Verde, Facebook se llenó de mensajes que rezaban: "La mayoría de las personas con las que hablo me dicen que el Presidente ideal sería Mockus. Pero agregan: 'No le doy el voto porque es un voto perdido'... ¿Qué tal si todos votáramos por él? De pronto no serían votos perdidos. Si estás de acuerdo con esto, pégalo en tu estado". Y al parecer -al menos para la consulta- la estrategia funcionó.
Pero el de Mockus está lejos de ser el único caso. Tal como dice Giraldo, "estamos viendo cómo, quizás por primera vez, las páginas web están yendo más allá de ser salas de prensa virtuales y se están sofisticando conectándose con las redes sociales". En estas elecciones no hay candidato cuyos mensajes no se nos aparezcan de un modo u otro cuando navegamos en Facebook o en Twitter, lo cual, asegura Giraldo, es de gran ventaja para las campañas políticas. Al fin y al cabo, mientras el número de personas que entran a la página de un candidato no es muy alto, sí lo es el de quienes se 'estrellan' con sus mensajes en las concurridísimas redes sociales.
(ir al artículo completo)
inventio•lab investiga y comunica
martes, 6 de abril de 2010
El virus verde de Mockus: 10 x 10 pueden dar los 7
El fenómeno de Antanas Mockus en las redes sociales lo convirtió, en un par de semanas, en un serio contendor en la carrera presidencial en Colombia. Hay quienes dicen que los verdes deben salir de las redes y pasar a las calles para que el "fenómeno digital" se convierta en un "fenómeno político". El contagioso movimiento verde tal vez se convierta en un verdadero "fenómeno político" antes de salir de las redes sociales y puede llegar a convertirse en un "fenómeno electoral" sumando de diez en diez.
Si usted es usuario frecuente de redes sociales, es posible que no haya podido escapar a la inundación de información que producen los seguidores del profesor Mockus en la red. Si además resulta ser uno de esos escasos ciudadanos interesados en temas políticos, es posible que toda esa información haya empezado a cambiarle la forma en la que se estaba imaginando las elecciones presidenciales del 2010 en Colombia.
El fenómeno digital es incuestionable. Antanas Mockus logró en unos meses más seguidores de los que consiguió el gobernante más popular de la historia de Colombia en ocho años. Fotos, imágenes, expresiones de apoyo, manifestaciones de emoción y de ciega y efervescente alegría, transforman el flujo de información en la red en un caudal imposible de interpretar o estudiar de manera sistemática (por lo menos en tiempo real).
Sin embargo, un fenómeno en redes sociales no se traduce automáticamente en un fenómeno político.
Una encuesta que muestre en los próximos días (hoy es 06 de abril de 2010) que el Partido Verde, en cabeza de Antanas Mockus, ha sumado más de ocho puntos de intención de voto entre los que dicen estar dispuestos a votar, permitiría hablar de un verdadero fenómeno político, antes no. Es posible que la sola noticia del acsenso en redes sociales le permita saltar a medios tradicionales (como de hecho está ocurriendo) y lo convierta en tema central de la agenda llegando a ciudadanos menos atentos y con menos interés en tramitar sus preferencias políticas frente a una computadora.
Aún siendo un fenómeno político podría estar lejos del único objetivo que debería importar: sacar suficientes votos para pasar a segunda vuelta y ganar.
En este contexto, el consejo de muchos ahora es llegar a las audiencias correctas. Segmentar, clasificar, dirigir, ordenar el mensaje…
Sin embargo, la estrategia que parece estar funcionando es la de motivar a los conversos a buscar zanahoriamente, entre sus amigos, familias y amigos 10 votos.
Si cada converso busca 10 votos y los consigue, no importa si el movimiento es visible para las redes sociales o medios los medios tradicionales. Si cada verde habla con 100 para convencer a diez, no importa si los candidatos en la contienda espabilan y reaccionan con un mensaje defensivo o no.
Si cada converso busca esos diez votos, la campaña e Mockus, no solo habrá logrado sacar de las redes sociales virtuales la emoción, sino que la habrá llevado a la intimidad de las relaciones personales de cada colombiano que se ha pintado de verde.
Desde las redes sociales, con los jóvenes y las ciudades con actitud de victoria, tal vez el profesor Mockus y su equipo nos den una inesperada sorpresa coloreándonos de verde de diez en diez.
Juan Fernando Giraldo
inventio•lab investiga y comunica
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