Lau & Redlawsk publican en el 2006 los hallazgos de una extensa investigación de laboratorio en la que simulan el transcurrir de una campaña presidencial en Estados Unidos, desde las primarias hasta las elecciones generales.
El desarrollo detallado de los resultados y los hallazgos asociados en el libro How Voters Decide, Lau y Redlawsk proponen un camino de investigación sobre la manera en la que los ciudadanos usan la información a la que acceden durante un proceso electoral para tomar una decisión “correcta” al momento de votar.
Resultaron particularmente interesantes tres conceptos clave a los que me referiré en tres entradas diferentes: la idea de “decisión correcta” en el voto, el uso de “heurística” o “atajos mentales” por parte del electorado, y la relevancia de la memoria en la decisión del voto.
Atajos mentales o heurística
La categorización y la heurística son atajos cognitivos que usamos los electores para simplificar el proceso de digerir la información a la que somos expuestos o para sobreponernos a los límites cognitivos que impone un proceso de toma de decisión en un contexto de exceso de información. Según los autores, usamos la heurística para “colorear” la información y vincularla a una evaluación previa o preexistente y los supuestos que vienen con ella para simplificar la toma de decisiones.
Los autores detallan diferencias en la forma en la que los electores más sofisticados hacen uso de la heurística, frente a un elector menos sofisticado. Según ellos, el elector sofisticado es más hábil generando trozos de información que agrupa y que hacen más expedito su proceso de toma de decisiones. Esto significa que una exposición superficial es suficiente para el elector más sofisticado para tomar atajos mentales y tomar decisiones. Esto puede ser explicado por que este elector tiene más experiencia separando las pistas relevantes de las irrelevantes (38).
Durante una campaña, entre más compleja es la tarea impuesta por el proceso electoral, el apoyo en simplificaciones y heurísticas más simples entra en acción.
De acuerdo con la investigación de Lau y Redlawsk, los atajos mentales más relevantes durante un proceso electoral son (232):
1. Apoyo de grupo (group endorsement): Posiblemente relacionado con un incremento de evidencia de política de identidad en las campañas electorales, el apoyo de un grupo específico a un candidato (un sindicato o una asociación) ofrecen pistas rápidas al elector para formarse una opinión y emitir un juicio o tomar una decisión sobre el candidato.
2. Estereotipos de partido o ideológicos (partisan and ideological schemata): La información sobre la filiación partidista e ideológica aporta información rápida, resumida y relevante al elector para acelerar y simplificar su proceso de formación de opinión y decisión.
3. Estereotipos sociales representados por el candidato. La información del candidato, la que se ve y la que se comunica, sobre sus estereotipos sociales es especialmente relevante para las personas con menos información sobre asuntos políticos. Su edad, su género, su raza, son información relevante que usa el electora para usar atajos rápidos en su proceso de toma de decisión.
4. Viabilidad del candidato. La viabilidad del candidato, principalmente a través de encuestas, es otra heurística usada por los electores y marca la relevancia de las encuestas que circulan durante el proceso electoral.
Ninguna de estas anclas, como las denominaría la teoría de framing o encuadramiento son, en mi opinión, condenas. Si lo fueran no sería necesario el proceso electoral. Pero si constituyen caminos tempranos y rápidos usados por electorado para tomar una decisión. Los autores encuentran que el uso de heurística es prácticamente universal (236), independientemente del tipo de elector, incluido su grado de sofisticación política o educación.
Sin embargo, advierten que la forma y el grado en el que se recurre a la heurística si puede variar considerablemente dependiendo del tipo de elector. Al contrastar el uso de heurística por sofisticación política, por ejemplo, encuentran que las personas más familiarizadas con los asuntos políticos, son menos propensos a usar filiación partidista y apariencia del candidato. Sin embargo, tienen un alto uso de heurística relacionada con validación de grupo.
Una característica del uso de heurística por parte de los ciudadanos más sofisticados, que no es lo mismo que los más educados, es que saben sacar de ellos más provecho de esta información llevándolos en un proceso más óptimo a la decisión correcta (249).
Un hallazgo interesante, potencialmente relevante para el proceso electoral colombiano en el que el uso de “primarias” o consultas interpartidistas empieza a hacer parte de la estrategia del camino hacia la presidencia, es la diferencia del uso de heurística entre las primarias y las elecciones generales. Aunque podría parecer evidente, durante las primarias hay más interés en la persona del candidato (y los estereotipos asociados), y para la elección general hay más interés sobre los temas. Se explica porque es natural que para el momento de las elecciones generales los detalles sobre la persona han sido agotados, o por lo menos ya el ciudadano se habrá formado un juicio inicial suficiente.
El valor del concepto de heurística, y su uso por parte de diferentes tipos de electores durante un proceso electoral es relevante para el establecimiento de una agenda de prioridades durante una campaña. La explicación de Lau y Redlawsk no me permite entender la diferencia entre el “framing” o encuadramiento y la heurística, o atajos mentales. Ambos son aportes valiosos de la psicología política a la comprensión de fenómenos de formación de opinión pública en asuntos políticos. Personalmente siento que los autores que tratan con el fenómeno del encuadramiento le dan más claridad y profundidad a la forma en la que los ciudadanos recurrimos a ciertos atajos para leer un mundo complejo, que no entendemos del todo, y sobre el que se nos exige una decisión relevante, como el voto. Sin embargo, mi camino para la exploración de la heurística a penas comienza.
En la siguiente entrada recogeré los hallazgos más interesantes de la investigación de Lau y Redlawsk sobre el uso de la memoria de los ciudadanos durante el proceso electoral. Pueblo sin memoria, dicen las élites sobre el elector colombiano. Veremos.